Lanzar un negocio no es tarea fácil. Quien lo ha intentado lo sabe: los comienzos están llenos de burocracia, dudas, gastos inesperados y una sensación de estar solo ante el peligro. En un país donde el trabajo por cuenta propia ha crecido de forma notable en los últimos años, son muchos los que necesitan algo más que ánimo para dar el salto.
El Banco Santander ha presentado recientemente una iniciativa que ha captado la atención de miles de autónomos y emprendedores: una propuesta pensada para acompañarlos desde el primer día, con recursos tangibles, herramientas digitales y acompañamiento personalizado.
Una propuesta integral que va más allá del dinero
A diferencia de otros servicios enfocados solo en financiación, esta nueva solución ofrece un paquete completo. No se trata solo de abrir una cuenta o pedir un préstamo. Desde el primer paso, el programa permite gestionar gratuitamente el alta como autónomo o como empresa, gracias a un acuerdo con Legálitas.

Por otro lado, el acceso a la Cuenta Negocios del banco supone un alivio para los bolsillos: sin comisiones de mantenimiento, sin condiciones de permanencia y sin necesidad de domiciliar recibos. Las transferencias son ilimitadas desde los canales digitales, y los ingresos de cheques se pueden hacer en oficina sin costes adicionales.
Beneficios que se suman y fidelizan
La propuesta también incluye una tarjeta de crédito profesional gratuita para quienes facturen más de 1.800 euros al año, y descuentos significativos en el uso de terminales de punto de venta (TPV): hasta un 90% de bonificación en comisiones. A esto se añade un año completo de Cyber Guardian, una herramienta de ciberseguridad orientada a proteger los dispositivos del negocio contra amenazas digitales.

El acceso a formación también es parte del paquete. A través de Open Academy, la plataforma educativa del banco, los usuarios pueden recibir talleres y contenidos prácticos sobre fiscalidad, marketing, digitalización y otros aspectos clave para la gestión empresarial. Además, hay descuentos exclusivos en servicios de renting tecnológico, permitiendo acceder a equipos y herramientas sin inversiones iniciales elevadas.
Requisitos accesibles para quienes buscan estabilidad
Para beneficiarse de todas estas condiciones, los interesados deben cumplir algunos requisitos: domiciliar los pagos a la Seguridad Social y a Hacienda, y contratar un seguro de protección con una prima mínima de 300 euros anuales. Un compromiso asumible para quienes buscan lanzar su proyecto con una base sólida y con respaldo desde el primer día.
Las reacciones no se han hecho esperar. Muchos de los que ya han accedido a esta propuesta destacan la claridad del proceso, la atención recibida y la sensación de estar acompañados en un momento crucial. “Es como tener un socio silencioso que te ayuda a arrancar”, afirmaba recientemente un usuario en redes sociales.
Y lo más impactante es que esta propuesta no viene de una fintech emergente ni de una startup especializada en autónomos. La herramienta y el programa llevan un nombre sencillo y directo: Emprèn. Y quien lo ofrece, para sorpresa de muchos, es nada menos que Banco Santander, que ha dejado claro que quiere liderar el apoyo real al emprendimiento en España.