Si hay algo que une a varias generaciones de familias en Catalunya, es la entrañable figura de Rovelló. Ese perro travieso, protagonista de una de las obras más emblemáticas de la literatura infantil catalana, se ha convertido en todo un símbolo cultural desde su primera aparición, hace ya casi sesenta años. En tiempos de cambios acelerados y nuevas modas, Rovelló nunca ha pasado de moda.
Ahora, cuando muchos pensaban que su historia ya estaba completa, surge una noticia inesperada: el escritor Josep Vallverdú, con sus sorprendentes 102 años, ha decidido dar una segunda vida al personaje que marcó su carrera.
Un regreso que nadie esperaba: ‘El retorn del Rovelló’
No todos los días un clásico regresa a la actualidad literaria, y mucho menos de la mano de un autor centenario. Sin embargo, Josep Vallverdú desafía todas las expectativas al anunciar la publicación de una secuela titulada "El retorn del Rovelló".
El anuncio se hizo viral en redes sociales, con programas como ‘Els Matins’ de TV3 celebrando el retorno del popular perro. Vallverdú, lejos de retirarse, sigue escribiendo y dibujando con disciplina diaria, y ha confesado que aún tiene cuatro obras inéditas listas para salir a la luz.

El escritor, que acaba de cumplir 102 años, reconoce que a su edad prefiere vivir el presente sin planear demasiado lejos. “Als 102, estàs pensant almenys amb el 103, no amb el 73”, bromeó en televisión, mostrando el mismo sentido del humor que ha caracterizado su obra literaria. Su vitalidad no pasa desapercibida y su deseo de seguir creando es, sin duda, una inspiración para el mundo editorial.
La reacción en redes y el legado cultural de Rovelló
La noticia del retorno de Rovelló ha causado sensación en las redes sociales. Usuarios de todas las edades han compartido recuerdos de infancia ligados al personaje, muchos acompañados de imágenes de los populares dibujos animados que durante años se emitieron en la televisión catalana.
No faltan mensajes de admiración hacia Vallverdú, a quien consideran un referente de la cultura y la literatura infantil. “Llarga vida a persones com ell”, se podía leer entre los cientos de comentarios, mientras los hashtags relacionados con Rovelló y Vallverdú ganaban protagonismo.
También se ha reabierto el debate sobre el impacto de la literatura infantil en la identidad catalana. Con más de 75.000 ejemplares vendidos, Rovelló ha marcado la educación sentimental de miles de lectores y ha demostrado que los clásicos, lejos de envejecer, pueden reinventarse con el paso del tiempo. Las reacciones no se han limitado a las redes: figuras del mundo editorial y literario han elogiado la lucidez y el compromiso de Vallverdú a la hora de escribir a una edad en la que la mayoría de autores ya han cerrado su obra.

Un símbolo de resiliencia y amor por la literatura
Que Josep Vallverdú siga en activo es, por sí solo, motivo de celebración. Sus palabras dejan claro que su proyecto vital es eterno, al igual que el cariño que recibe de los lectores. “Seria ser presumptuós pensar més enllà de l’endemà”, ha afirmado en una entrevista reciente, pero la realidad es que con cada nueva historia, Vallverdú demuestra que la pasión por contar no entiende de edad.
El retorno de Rovelló es mucho más que una novedad editorial: es un recordatorio de que la cultura y el arte no tienen fecha de caducidad. Habrá que esperar al mes de noviembre para descubrir las nuevas aventuras de este perro entrañable, pero algo es seguro: el fenómeno Rovelló está lejos de apagarse.
¿Es la última obra?
¿Hasta dónde llegará el legado de Rovelló? ¿Qué otros clásicos podrían renacer de la mano de autores que, como Vallverdú, desafían el tiempo y la rutina? Por ahora, el anuncio ha conseguido lo que parecía imposible: unir a varias generaciones alrededor de un mismo libro y convertir de nuevo a un perro en protagonista absoluto del panorama literario catalán.
El regreso de Rovelló nos deja una valiosa lección: la literatura puede ser eterna si quien la escribe lo hace desde el corazón y con la vitalidad de un auténtico apasionado. Seguiremos atentos a las novedades de Josep Vallverdú, porque si algo ha quedado claro es que, a los 102 años, sigue teniendo mucho que contar.