En un contexto económico marcado por la moderación de la inflación y la recuperación del poder adquisitivo, los pensionistas españoles han recibido en abril de 2025 una noticia alentadora: un incremento generalizado en sus prestaciones, reflejo de las reformas estructurales implementadas en los últimos años.
Revalorización de las pensiones en 2025
La pensión media en España se ha situado en abril en 1.309,1 euros mensuales, lo que representa un aumento del 4,5% respecto al mismo mes del año anterior. Este incremento se enmarca en la revalorización de las pensiones conforme al Índice de Precios al Consumo (IPC), establecida por la reforma de pensiones de 2021.
En particular, las pensiones contributivas han experimentado una subida del 2,8%, mientras que las pensiones mínimas y no contributivas han aumentado entre un 6% y un 9%, dependiendo de la modalidad.

Este ajuste ha supuesto un incremento medio anual de entre 500 y 600 euros para los beneficiarios, consolidando la pensión media de jubilación en 1.503,3 euros mensuales.
Situación específica en Catalunya
En Catalunya, la pensión media ha alcanzado los 1.360,40 euros, con un incremento del 4,43% respecto a abril de 2024. La mayoría de las prestaciones corresponden a pensiones de jubilación, con una media de 1.535,82 euros. Por demarcaciones, Barcelona presenta la pensión media más alta, con 1.401,01 euros, seguida de Tarragona (1.283,32 euros), Girona (1.230,90 euros) y Lleida (1.181,99 euros).
Impacto de las reformas estructurales
Las reformas implementadas en los últimos años han tenido un impacto significativo en el sistema de pensiones. La eliminación del factor de sostenibilidad y la vinculación de las pensiones al IPC han incrementado la generosidad del sistema, elevando la tasa de reemplazo al 71,7%, una de las más altas de la Unión Europea.

Además, se ha observado un aumento en la edad media de acceso a la jubilación, que se sitúa en 65,1 años, frente a los 64,4 años en 2019, reflejo de los incentivos a la jubilación demorada.
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) proyecta que, de mantenerse las tendencias actuales, la pensión media podría incrementarse en un 25% para 2050. Sin embargo, advierte que este aumento conllevará un incremento del gasto público en pensiones, que podría alcanzar el 16,1% del PIB en 2050, lo que requerirá ajustes fiscales adicionales para garantizar la sostenibilidad del sistema.