En los últimos años, quizás desde la última década, los hábitos gastronómicos de muchos ciudadanos han cambiado de manera sustancial. Siguen los amantes de la cocina tradicional, de los pucheros, de los platos de cuchara y de las tapas de toda la vida. Pero hay una nueva corriente, alentada por las redes sociales, que apuesta por una cocina mal llamada moderna y creativa, con platos poco innovadores y muy repetitivos.
No hay que desmerecer la cocina de autor, pues en Catalunya tenemos grandes restaurantes, con grandes cocineros. No en vano, este es el territorio del Estado español, junto con el País Vasco, con más estrellas Michelin. Se trata de restaurantes de alta cocina, con menús degustación acompañados de excelentes maridajes en los que se pueden degustar los mejores productos de nuestra tierra, perfectamente combinados.
Girona, sede de El Celler de Can Roca, el que ha sido el mejor restaurante del mundo durante muchos años, abandera la capital gastronómica de Catalunya y muchos establecimientos están aprovechando este tirón. En este sentido, muchos acaban siendo un quiero y no puedo y acaban ofreciendo platos con muchas pretensiones, pero con poca calidad culinaria. En este sentido, un presentador de La Sotana, Andreu Ginola, ha publicado un mensaje en su perfil de la red social X en el que denuncia la nueva moda de la ciudad de Girona.
Según Ginola, Catalunya y, en especial, Girona, se está llenando de restaurantes con los mismos platos: pulpo, tártar de salmón con aguacate, tataki de atún y croquetas. También se podría añadir en la lista tártar de atún, steak tártar, carpaccio, ceviche y tarta de queso para postre, además de muchos otros ejemplos.
Se dice el pecado pero no el pecador
No nos vamos a mojar y no vamos a decir la lista de restaurantes a los que probablemente se refiere el periodista deportivo. Sí que podemos afirmar sin temor a equivocarnos que son establecimientos que están situados en la parte antigua de la ciudad, en calles cercanas al río y en establecimientos de pequeñas dimensiones.
Los comentarios no han tardado en llegar y otros usuarios de redes sociales han puesto ejemplos de restaurantes tradicionales situados a pocos minutos de Girona, como Can Xifra, situado en Cartellà.
Comparaciones con Barcelona
Uno de los comentarios que se ha repetido más es la comparación de Girona con Barcelona. Los ciudadanos de Girona consideran que la ciudad del Onyar se está "barcelonizando" a una gran velocidad. Es una ciudad con un gran atractivo turístico nacional y europeo y muchos catalanes la consideran la segunda capital de Catalunya.