Shakira ha acusado a Hacienda de estar más interesada en quemarla "públicamente en la hoguera" que en escuchar sus razones y ha asegurado que ha terminado pagando más de lo que le correspondía. La cantante colombiana lo ha dicho en una carta publicada en 'El Mundo', donde asegura que la Agencia Tributaria construyó un ''artificioso relato'' que confundía y manipulaba el deseo de establecerse en un país y el de que prosperara una relación que se desarrollaba en ese país para convertirla en residente fiscal desde 2011.
Shakira insiste en que no lo era entonces y que cuando lo fue lo declaró. Sin embargo, dice que decidió llegar a un pacto en el juicio por sus hijos.En la misiva, reprocha que una institución creada para el servicio a los ciudadanos "no debería utilizar todo su poder y recursos para criminalizar caprichosamente a quien le conviene". Pero añade: "Todo el mundo sabe que el romance se vende bien".
Según la cantante, en 2011 ella viajaba a España por su relación con el ex jugador del FC Barcelona Gerard Piqué, pese a las "complicaciones" que esto le generaba ya que sus centros de actividad laboral estaban lejos del estado español. Así, defiende que cuando regresaba a España lo hacía "para que prosperara la relación, no por vocación de permanencia". La cantante concreta que en el 2011 solo vivió en España 73 días y defiende que el mínimo establecido por ley por considerarse residente fiscal es de 183 días.
Añade que en esta estrategia de Hacienda existe también un prejuicio machista ya que ha considerado que si el cantante hubiera sido un hombre estadounidense que se hubiera enamorado de una española, le cuesta creer que la Agencia Tributaria hubiera considerado que tenía una intención de arraigo.
Menciona que fue víctima de una 'cacería'
Así, Shakira sigue asegurando que algunos técnicos de esta agencia construyeron un relato "infantil y moralista" en el que ella era una cantante que evitaba cumplir con sus obligaciones fiscales y ellos representantes de la justicia y la decencia. "La realidad fue muy distinta: yo cumplí siempre con mis obligaciones.
Mis finanzas fueron investigadas por instituciones tan poco sospechosas como la Casa Blanca o el IRS y aprobadas por otros países de la Unión Europea", ha relatado. Afirmó que ninguno de ellos encontró ninguna ilegalidad, mientras que, en cambio, un director general de inspección de la Agencia Tributaria la "criminalizó" antes del juicio.
De hecho, Shakira considera que la Agencia Tributaria no trata de castigar a quien no cumple, sino de mostrar "trofeos de cacería para reconstruir una credibilidad en entredicho". Ha añadido que lo hace con amenazas de cárcel y poniendo en apuro la tranquilidad de sus hijos.
Shakira se excusa
Lamentó que se hiciera creer a la opinión pública que no pagaba impuestos, cuando aseguró que si se suman todas las cantidades de lo que pagó voluntariamente y de las multas "injustificadas", acabó pagando "mucho más de lo que tenía que pagar ". "Estado español se quedó con una suma superior a la totalidad de mis ganancias de aquellos años", dice.
Y es que Shakira asegura que, aunque parezca mentira, la década que residió en España, fue financieramente perdida para ella, no porque trabajara poco sino porque todo lo que ganó "se lo quedó España ".
La cantante dice que ha decidido explicarse ahora por sus hijos, a los que quiere dejar el legado de una mujer "que expuso sus razones con calma" y cuando lo consideró necesario. Dice también que lo hace para recuperar su vida, al igual que canta para poder volver "a vivir tranquila y pasar página".
En noviembre de 2023, la cantante colombiana reconoció que cometió fraude fiscal de 2012 a 2014 por valor de unos 14,5 millones de euros y ha aceptado una pena de tres años de cárcel, que quedó sustituida por una multa de 432.000 euros.