La infanta Elena, primogénita de los reyes eméritos españoles Juan Carlos I y Sofía, ha dado un paso que podría generar tensiones en el seno de la familia real española. Conocida por su lealtad inquebrantable hacia su padre, la infanta ha tomado una decisión que, aunque motivada por el cariño, podría no ser del agrado del rey emérito.
El movimiento de Elena de Borbón
Desde que Juan Carlos I se trasladó a Abu Dabi en agosto de 2020, su equipo de seguridad ha sido fundamental para su bienestar y protección. Este grupo, compuesto por militares retirados de máxima confianza, ha desempeñado roles que van más allá de la seguridad, actuando como asistentes personales y confidentes del exmonarca.
Sin embargo, tras más de cuatro años en los Emiratos Árabes Unidos, varios de estos escoltas han expresado su deseo de regresar a España. El aislamiento, la distancia de sus familias y la monotonía de la vida en el extranjero han comenzado a pesar en ellos, llevándolos a considerar seriamente su retorno.
Consciente del impacto emocional que la partida de estos hombres tendría en su padre, la infanta Elena ha decidido intervenir. Sin consultar previamente al rey emérito, ha ofrecido a los escoltas un incremento salarial significativo con la esperanza de persuadirlos para que permanezcan en Abu Dabi. Esta maniobra, aunque bienintencionada, podría ser vista por Juan Carlos I como una intromisión en asuntos que él preferiría manejar personalmente.
Silencio al respecto
Hasta el momento, ni la Casa Real ni el entorno cercano al rey emérito han emitido declaraciones oficiales sobre este asunto.
La relación entre la infanta Elena y Juan Carlos I siempre ha sido estrecha. En múltiples ocasiones, la infanta ha mostrado su apoyo incondicional al exmonarca, incluso en momentos de controversia. Por ejemplo, en 2024, se reveló que Elena y su hermana, la infanta Cristina, se posicionaron al lado de su padre durante el escándalo relacionado con Bárbara Rey.
Los Borbones, un escándalo constante
La dinámica familiar de los Borbones siempre ha sido objeto de interés público, y esta situación añade un nuevo capítulo a la compleja relación entre padre e hija. Mientras tanto, la opinión pública y los medios de comunicación estarán atentos a cualquier desarrollo que pueda surgir en torno a este tema.
¿Será este gesto de la infanta Elena suficiente para retener a los escoltas y garantizar la tranquilidad de Juan Carlos I en su exilio?