En las últimas semanas, la Princesa Leonor ha estado en el centro de la polémica. Su celebración de cumpleaños número 19 coincidió con la tragedia que azotó a València tras las intensas lluvias de la DANA. Mientras la familia Borbón disfrutaba de una lujosa fiesta, los habitantes de Paiporta y otras localidades luchaban contra el barro y el agua.
La situación se agrava con las decisiones recientes de la Casa Real. Froilán y Victoria Federica, quienes expresaron interés en colaborar con las labores de ayuda en València, no recibieron autorización para hacerlo. Fuentes cercanas aseguran que esta negativa se debe a un intento de proteger la imagen de la heredera.
Por si fuera poco, Leonor también ha sido motivo de comentarios en la Escuela Naval. Según varias fuentes, Letizia ha tenido que intervenir directamente para frenar las constantes escapadas nocturnas de su hija. Las fiestas y encuentros sociales no pasan desapercibidos, y han llevado a que Leonor reciba un toque de atención por su comportamiento.
La comparación con Christian de Dinamarca
El príncipe Christian de Dinamarca ha ofrecido una imagen opuesta en los medios. La Casa Real danesa publicó imágenes del joven ayudando en tareas humanitarias en África. Una de las fotografías lo muestra trabajando en terrenos fangosos, lo que muchos han interpretado como una indirecta hacia Leonor.
Christian no solo muestra una actitud ejemplar, sino que también ha compartido detalles sobre su experiencia. Durante tres meses, ha participado en tareas de conservación de la naturaleza, construcción de viviendas y registro de fauna local. Este compromiso ha sido elogiado tanto dentro como fuera de Dinamarca, destacándolo como un modelo a seguir para otros jóvenes de la realeza.
Las diferencias entre las dos casas reales
El contraste entre las casas reales de España y Dinamarca no pasa desapercibido. Mientras Christian se ensucia las manos, Leonor parece estar más interesada en eventos sociales que en compromisos humanitarios. Esta disparidad ha generado debate sobre la preparación de ambos como futuros monarcas.
Además, los expertos en protocolo señalan que la comunicación desde Zarzuela ha sido deficiente. El enfoque en proteger la imagen de Leonor podría estar teniendo el efecto contrario. Mientras tanto, los daneses no dudan en mostrar a Christian trabajando, ganándose el respeto del público.
Una oportunidad perdida
La reciente tragedia en València podría haber sido una oportunidad para que Leonor demostrara su empatía y compromiso. Sin embargo, la falta de acción por parte de la princesa ha alimentado las críticas. Las comparaciones con otras casas reales europeas no juegan a su favor y destacan aún más las deficiencias en su preparación como heredera.
Con el año nuevo a la vuelta de la esquina, queda por ver si Leonor y su familia tomarán medidas para cambiar esta percepción. Por ahora, las imágenes de Christian de Dinamarca seguirán siendo una sombra difícil de evitar para la futura reina de España.