Iago Aspas y el escudo del Celta

Salta la sorpresa con Iago Aspas en el Celta

El Príncipe de las Bateas no ha tenido un comienzo de 2025 nada sencillo

El Celta de Vigo atraviesa una temporada peculiar, marcada por decisiones técnicas que han sorprendido a sus aficionados y al entorno futbolístico en general. Muchas de ellas, eso sí, han servido para que el Celta dé una buena imagen en LaLiga y se haya alejado de la amenaza del descenso. Uno de los nombres propios que protagoniza esta situación es el veterano delantero gallego Iago Aspas, cuyo rol en el equipo dirigido por Claudio Giráldez ha cambiado radicalmente en las últimas semanas.

La situación actual del jugador gallego es, cuando menos, desconcertante. Iago Aspas, considerado históricamente como una pieza fundamental en el ataque del Celta, apenas está contando con minutos esta temporada. La llegada de refuerzos como Iker Losada, cedido por el Betis en enero, y el ascenso de jugadores como Williot Swedberg han dejado en segundo plano a Aspas, limitando sus apariciones a escasos minutos residuales.

Iago Aspas celebrando un gol
Iago Aspas celebrando un gol | @rccelta

Precisamente, en el último partido disputado frente al Girona, Aspas ingresó al campo en el minuto 84, jugando apenas seis minutos en el empate (2-2). Aunque su participación fue mínima,  logró convertirse oficialmente en el jugador del Celta con más partidos disputados en la historia del club, alcanzando un récord histórico que resalta aún más la extrañeza de verlo relegado al banquillo.

Una decisión técnica inexplicable

Claudio Giráldez ha mantenido absoluto hermetismo sobre esta situación. El entrenador celeste evita dar explicaciones concretas sobre el motivo detrás de la suplencia recurrente de Aspas, generando más dudas y especulaciones en torno al futbolista. El pasado domingo ante el Girona (2-2), Aspas ingresó en el minuto 84, jugando apenas seis minutos y sin margen para cambiar el curso del partido.

Lo más llamativo es que Aspas, quien históricamente ha sido una pieza fundamental para el equipo, ahora parece no ser siquiera una de las principales opciones del entrenador gallego para revitalizar los partidos. Frente al Girona, fue el último cambio de Giráldez, mostrando claramente la pérdida de confianza hacia un futbolista que durante años ha sido sinónimo de gol y liderazgo.

Estadísticas que preocupan en Balaídos

Los datos recientes son esclarecedores y preocupantes. Desde diciembre hasta febrero, Aspas sufrió una rotura fibrilar que lo apartó varias semanas del campo, perdiéndose cinco partidos consecutivos. Tras recuperarse, ha participado únicamente en algunos minutos finales de encuentros clave, como los 25 minutos ante Atlético de Madrid o los 28 minutos ante Osasuna, encuentros en los que logró ver puerta.

En total, desde finales de diciembre, Aspas ha disputado menos de una hora de juego efectivo, algo que se antoja insuficiente para alguien acostumbrado a liderar ofensivamente al Celta.

La lesión de Swedberg, una puerta que se abre

La reciente lesión de Williot Swedberg, confirmada esta semana, abre una nueva ventana de oportunidad para Aspas. El sueco, quien se había ganado la confianza del técnico como uno de sus principales delanteros, estará varias semanas fuera debido a una rotura fibrilar. Esta ausencia supone una ocasión inmejorable para que Aspas vuelva a reivindicarse en el equipo titular.

En Vigo, la expectativa crece sobre lo que podría pasar en las próximas semanas, especialmente si Giráldez decide devolverle a Aspas el protagonismo perdido. El delantero, consciente de que tiene contrato hasta 2026 y con ofertas atractivas desde ligas emergentes como la Saudi Pro League, afronta ahora una disyuntiva decisiva: luchar por minutos en el equipo de su vida o explorar otras opciones donde pueda sentirse valorado y protagonista.