Kylian Mbappé será el nuevo dorsal número 10 del Real Madrid. La noticia, confirmada recientemente por Ramón Álvarez de Mon y por otros medios especializados, ha dado mucho que hablar, no solo por lo que significa dentro del club blanco, sino también por lo que representa en el contexto del fútbol mundial.
Y lo más curioso es que esta elección coincide, casi de forma simbólica, con la asignación del dorsal 10 a Lamine Yamal en el FC Barcelona. ¿Casualidad o provocación? Ramón Álvarez de Mon, uno de los periodistas más informados del entorno madridista, adelantó hace días que Mbappé llevaría el '10' en su nueva etapa como jugador del Real Madrid.
A pesar de que muchos pensaban que mantendría el dorsal 7, que también ha sido icónico en su carrera —y que usó Cristiano Ronaldo en el club blanco—, finalmente el francés optará por un número cargado de historia en el Santiago Bernabéu: el 10 de Luis Figo, de James Rodríguez, y en su día, incluso, de Ferenc Puskás.
¿Y qué tiene que ver Lamine Yamal?
La coincidencia temporal ha levantado más de una ceja. Justo cuando el FC Barcelona confirma que su joven joya, Lamine Yamal, lucirá el dorsal 10 a partir de esta temporada, en sustitución del mítico Leo Messi, el Real Madrid anuncia que su nueva estrella llevará exactamente el mismo número.
Desde algunos sectores del entorno culé ya se habla de “copia” o incluso de “complejo”. Según esta visión, el Real Madrid ha reaccionado al golpe de efecto del Barça con un movimiento que intenta eclipsarlo. Para muchos aficionados blaugranas, ver a Lamine portar el 10 significa el relevo natural de Messi, el símbolo de un nuevo ciclo.
La comparación entre ambos jugadores es más simbólica que futbolística. Mbappé, a sus 26 años, ya ha sido campeón del mundo, máximo goleador de la Ligue 1 en múltiples temporadas, figura de Francia y estrella consolidada. Lamine, con apenas 17 años, es una promesa brillante, pero aún está en construcción.
El morbo del clásico… ahora con dos dieces
La temporada 2025-26 promete más tensión que nunca. Por un lado, el Real Madrid presentará a su flamante número 10, Mbappé, como el gran estandarte de su proyecto galáctico. Por el otro, el Barça pondrá todas sus esperanzas en Lamine Yamal, la perla de La Masia, que con tan solo 17 años llevará la camiseta que una vez vistió Leo Messi.
Habrá clásicos con doble dosis de simbolismo. Mbappé vs. Lamine. El número 10 blanco contra el número 10 azulgrana. Dos formas de entender el fútbol, dos edades, dos estilos, dos narrativas. Pero sobre todo, dos clubes que no dejan pasar una oportunidad para marcar territorio.
Lo que a simple vista puede parecer una mera elección de dorsal, se convierte en otro capítulo más de la eterna rivalidad entre Barça y Madrid. Y si bien cada club toma sus decisiones internas con independencia, lo cierto es que el fútbol actual vive también de los gestos, las percepciones y los símbolos.