El partido entre el F.C Barcelona y el Girona FC no se está pareciendo para nada al que vivimos la temporada pasada en Montilivi. El año pasado, los de Míchel fueron superiores a los hombres de Xavi Hernández, y acabaron terminando el partido ganando 4-2. Este año, sin embargo, Hansi Flick ha aprendido de los errores que vio en diferido, y está mostrando con su equipo una imagen muy buena del conjunto azulgrana.
En las declaraciones previas del partido, Míchel decía que quería ser protagonista con el balón, y ganarle la posesión al Barça. No obstante, en esta primera parte, gracias al buen hacer de los visitantes y la efectiva presión tras pérdida, los hombres de Flick están siendo superiores al conjunto de Míchel. El partido ha empezado con bastante igualdad en el terreno de juego, pero el partido se ha decantado para los azulgranas después de un error grotesco de David López en defensa.
Ante la presión asfixiante del Barça, el Girona quería salir con el balón jugado en todas las jugadas. En una de ellas, Lamine ha acabado robándole la pelota a David para poner el 0-1 en el marcador. Desde este momento, el F.C Barcelona ha empezado a hacerse grande en el terreno de juego, y sólo 7 minutos más tarde Lamine ha vuelto a aprovechar un desajuste para anotar.
Con el 0-2, parecía que los visitantes se iban a ir con una ventaja muy cómoda en el marcador a vestuarios. El Girona, pero, ha querido reivindicarse y se ha alzado al ataque los últimos minutos de la primera parte. En una gran jugada de Miguel, Bryan se ha topado con Ter Stegen, y seguidamente la jugada ha derivado en una mano que de primera ha sido pitado como penalti.
¿Porque el árbitro ha rectificado?
En un primer momento, el colegiado del encuentro había dictaminado la pena máxima por la mano de Iñigo Martínez, y Abel Ruiz ya se disponía a tirar el penalti para recortar. Sin embargo, el árbitro ha sido llamado por el VAR y ha ido a revisar la jugada al monitor de la sala VOR. Allí, tras revisionar la jugada, ha decidido que se trataba de una mano involuntaria que no debía ser sancionada.
Con el reglamento en mano, no es penalti ya que la mano viene de un rebote de otro futbolista del F.C Barcelona, Alejandro Balde. Así pues, aunque Iñigo tenga la mano en posición antinatural no es una acción punible. No obstante, la jugada ha sido protagonista de mucha polémica y debate en redes sociales en los últimos minutos, y en el descanso no se ha hablado de otra cosa.
Algunos aficionados culés decían que sí que podía ser pitado. "Lo de que no sea penatli esto es para llorar, que malos son", explicaban un aficionado del Barça en relación a las actuaciones arbitrales. Por otro lado, otros aficionados aplaudían la decisión arbitral, y ya empezaban a hablar de 'robo' si esto acababa en pena máxima.
"Han estado a un minuto de pegarnos un robazo interesante. ¿Como va a ser penalti una mano por un balón que viene rebotado de un compañero y que para colmo el futbolista esta de espaldas?", explicaba un usuario. Por su parte, como es normal, los aficionados del Girona están muy enfadados con la decisión, ya que para ellos debería haber sido penado con un tiro en los 11 metros.