La de anoche fue una de las veladas más eufóricas que se recuerdan en Can Barça en los últimos años. El preludio perfecto para El Clásico del sábado. Los de Hansi Flick arrollaron sin piedad a uno de los mejores equipos del mundo y pudieron imponerse con un contundente 4-1 en el electrónico que rompía una catastrófica dinámica contra el Bayern de Múnich.
Los bávaros habían vencido a los azulgranas en los últimos seis duelos en los que se habían enfrentado en la Champions League. Y, para más inri, en cinco de ellos lo habían hecho con una soberbia superioridad (8-2, 0-3, 0-3, 3-0 y 2-0). Por lo tanto, en el Barça tenían herido el orgullo; ayer era el día perfecto para remediarlo, y así ocurrió.
Si bien es cierto que el Bayern fue el gran dominador de gran parte de la primera mitad, con claras acciones de peligro e incluso un gol anulado, el Barça supo estar mejor plantado y leer mejor el partido. Raphinha anotó en el primer minuto del choque y al borde del descanso, ya cuando el dominio volvía a ser culé, anotó el segundo en su cuenta particular, el tercero del Barça. Pero el show del brasileño no se iba a quedar ahí, pues en el 56' iba a aprovechar un pase brillante de Lamine Yamal, de esos a los que en los highlights deberían ponerle de fondo la octava sinfonía de las Cuatro Estaciones de Vivaldi, para sellar un bárbaro hattrick. Lewandowski fue el otro anotador.
Lamine Yamal, satisfecho
No pudo anotar ningún tanto y 'sólo' repartió una asistencia, pero el duelo que se marcó Lamine Yamal también fue de muchísimo nivel. Más allá del brillante pase de gol que le regaló a Raphinha, el joven talento dejó jugadas individuales propias de videojuego. Un día más en la oficina para él, vaya.
Luego, al término del partido se pasó por los micrófonos de Movistar+ e hizo una valoración de lo que se acababa de presenciar en Montjuïc. "Le teníamos muchas ganas al Bayern", empezó reconociendo, sin pelos en la lengua. "Queríamos demostrar en Champions que estamos muy unidos y somos un equipazo", añadió.
Sin duda, Lamine Yamal se mostró satisfecho con el trabajo del equipo: "Hemos pasado el examen con sobresaliente". Quiso elogiar también la gran labor de los dos pivotes en el esquema inicial, Pedri y Marc Casadó. "Me lo he pasado muy bien, creo que se ha notado”, terminó sentenciando.