El FC Barcelona y el Inter de Milán empataron 3-3 en un partido vibrante en el Estadi Olímpic Lluís Companys. La ida de las semifinales de la Champions League 2025 dejó goles, polémicas y una exhibición de intensidad que ha generado múltiples reacciones. Mientras la afición ya piensa en la vuelta en San Siro, el mundo del fútbol sigue comentando lo ocurrido.
Un Barça que mostró coraje y talento
El Barcelona ofreció una actuación de gran carácter. Pese a verse por detrás en el marcador en dos ocasiones, el equipo supo reaccionar y mantener viva la eliminatoria. La intensidad en la presión y el atrevimiento en ataque fueron sus principales armas. El Inter, fiel a su estilo, buscó castigar los errores defensivos del rival.
La prensa española destacó el arrojo del Barça y la madurez de sus jóvenes talentos. Lamine Yamal volvió a ser elogiado como una de las grandes figuras de la noche por su desequilibrio y su madurez táctica. En Italia, los periódicos subrayaron la eficacia del Inter, aunque admitieron que el dominio territorial y la intensidad fueron propiedad del conjunto catalán.
Redes sociales: orgullo culé y debate táctico
La afición del Barcelona mostró orgullo por el espíritu competitivo del equipo. También expresó preocupación por los problemas defensivos y las lesiones, especialmente la de Jules Koundé. Los seguidores del Inter valoraron el resultado como positivo, reconociendo las dificultades que vivieron ante el asedio blaugrana.

El arbitraje fue uno de los temas centrales tras el partido. Una posible mano en el área del Inter no sancionada y varias entradas fuertes que no recibieron tarjeta roja generaron debates encendidos. Aunque las decisiones no cambiaron el resultado, sí alimentaron la sensación de que el Barça mereció algo más en ciertos momentos del encuentro.
El sorprendente elogio de Ramón Álvarez de Mon
Pero la reacción que más sorprendió llegó desde un sector inesperado. Ramón Álvarez de Mon, periodista madrileño muy vinculado al Real Madrid, sorprendió a propios y extraños con una reflexión que se hizo viral:

"La intensidad con la que juega el Barcelona. El Inter, más allá del golazo, no ha podido salir." Sus palabras no solo reconocieron el dominio del Barça en la ida, sino que reflejaron el respeto creciente que despierta este joven equipo incluso entre analistas tradicionalmente críticos.
Para muchos culés, este reconocimiento fue casi tan importante como el resultado: una muestra de que el proyecto azulgrana empieza a infundir temor incluso entre los rivales históricos. El empate 3-3 dejó una eliminatoria abierta y una corriente de elogios inesperados hacia el Barcelona.
El Barcelona deberá mantener la intensidad mostrada en la ida, pero mejorar su solidez defensiva ante un Inter letal al contragolpe. La baja de Koundé obligará a Flick a ajustar su línea de fondo, posiblemente dando entrada a Eric García o Christensen. Además, será crucial que Lewandowski - si vuelve de lesión - y Yamal mantengan su inspiración ofensiva.
El Inter, por su parte, buscará aprovechar cualquier espacio y confiará en Lautaro Martínez para desequilibrar en casa.