El golazo de Lamine Yamal en el derbi ante el Espanyol desató la euforia en la afición blaugrana. Pero nadie vivió ese momento con tanta emoción como su familia. Especialmente su hermano pequeño, Keyne, que volvió a protagonizar una tierna escena durante la celebración del tanto.
Una familia entregada al talento de Lamine
Corría el minuto 53 del partido cuando Lamine Yamal marcó un auténtico golazo desde fuera del área. Su disparo, potente y con el habitual efecto interior, entró directo a la escuadra de la portería perica. Un tanto decisivo para que el Barça se proclamara campeón de Liga. En casa de los Yamal, el gol se celebró de manera efusiva. La madre del jugador grabó la televisión, mostrando toda su emoción al ver a su hijo marcar un tanto clave. El padre tampoco ocultó su alegría y celebró por todo lo alto el golazo del joven crack blaugrana.
El pequeño Keyne vuelve a emocionar a los culés
El gran protagonista de esta celebración, sin embargo, fue el hermano pequeño de Lamine, Keyne. El niño, que ya ha conquistado el corazón de la afición culé con varios vídeos virales, volvió a regalar un momento entrañable. Mientras sus padres celebraban, Keyne gritaba emocionado «goooool» antes de añadir una frase que enterneció a todos: «gol del tete».

Estas imágenes rápidamente se hicieron virales entre los aficionados del Barça, que ya consideran a Keyne como uno más de la familia culé. El pequeño hermano del jugador se ha ganado la simpatía de todos por sus apariciones anteriores, especialmente en la celebración de títulos recientes del Barça y la selección española.
Una estrella en crecimiento y una familia muy querida
La escena no hace más que reforzar la conexión especial entre Lamine Yamal, su familia y la afición azulgrana. Hace pocas semanas, Keyne también fue protagonista durante la celebración de la Copa del Rey, acompañando al crack blaugrana sobre el césped del Estadio Olímpico de La Cartuja. También estuvo presente en la Eurocopa conquistada por España el pasado verano, siempre apoyando a su hermano.
Recientemente, Keyne se hizo viral saludando de forma divertida al cantante Travis Scott en el Clásico del domingo anterior. Momentos así han convertido al pequeño hermano del futbolista en una auténtica sensación entre los aficionados culés.
Lamine Yamal, por su parte, sigue creciendo a pasos agigantados como estrella del Barça. Con tan solo 17 años, su gol frente al Espanyol ha significado el título de Liga. Una temporada brillante que culmina con el cariño incondicional de su familia y una afición rendida a su talento. Su hermano Keyne ya es parte de esta bonita historia, conquistando a los seguidores culés con cada celebración, cada gol del «tete», y cada vídeo compartido por sus padres.