Gráfico de barras con flecha ascendente superpuesto sobre una imagen de una presa y un paisaje natural.

Última hora de la sequía: Solo un embalse catalán aumenta las reservas en 2025

Los datos de la ACA no son positivos en este inicio de año

Catalunya sigue viviendo una de las sequías más graves de los últimos años. Las cifras actuales son alarmantes: los embalses de las cuencas internas están al 33,29 % de su capacidad total. Esta cifra refleja la crítica situación en la que se encuentra el abastecimiento de agua.

La capacidad total de los embalses de las cuencas internas alcanza los 700 hectómetros cúbicos. Actualmente, el agua almacenada se sitúa muy por debajo de la media histórica de los últimos cinco años. A pesar de las lluvias ocasionales, el impacto de la sequía persiste, agravando los retos de la gestión hídrica en Catalunya.

Un panorama desolador para la mayoría de los embalses

La mayoría de los embalses de las cuencas internas presentan niveles muy bajos. Por ejemplo, el embalse de Sau está al 15 % de su capacidad, y Susqueda al 36 %. Otros, como Siurana, apenas alcanzan el 10 %.

Pantano de Sau
El embalse de Sau | ACN

La situación es especialmente crítica en zonas donde estas reservas son fundamentales para el riego y el consumo humano. Sin embargo, no todas las noticias son negativas. En medio de esta crisis, un embalse ha logrado incrementar ligeramente su nivel.

Se trata del embalse de Sant Ponç, ubicado en Clariana de Cardener, que actualmente se encuentra al 51 % de su capacidad. Este aumento es una excepción, ya que el resto de embalses no muestra mejoras significativas.

Sant Ponç, un caso único

El embalse de Sant Ponç ha experimentado un incremento notable en comparación con el año pasado. Ha pasado de estar al 27 % en 2024 al 51 % en 2025.

Este embalse es una excepción en el panorama general y refleja la importancia de las condiciones locales y de una gestión eficiente del recurso. Sin embargo, este incremento aislado no es suficiente para compensar la crisis generalizada en el resto de embalses.

Vista de un embalse rodeado de montañas con un camino sobre la presa y un cielo despejado reflejado en el agua.
El embalse de Sant Ponç | ACN

Medidas y alternativas necesarias

Ante esta situación, se están estudiando diversas alternativas para mejorar el uso y la gestión del agua. Entre ellas, se habla de ampliar la reutilización del agua regenerada y de invertir en infraestructuras más eficientes.

Además, se plantea fomentar la sensibilización ciudadana para reducir el consumo en actividades cotidianas. Sin cambios importantes en las políticas y los hábitos, será difícil revertir esta tendencia.

¿Qué podemos esperar?

Los expertos insisten en que el contexto de cambio climático seguirá afectando las reservas de agua. Las lluvias cada vez más irregulares dificultan la recuperación de los embalses. Además, se plantea la necesidad urgente de nuevas políticas hídricas que garanticen un uso más sostenible del agua en Catalunya.

La situación actual no solo afecta al abastecimiento doméstico, sino también al sector agrícola y a la industria. Sin medidas inmediatas y efectivas, la sequía seguirá siendo un desafío creciente en los próximos años. La población y las autoridades deben trabajar conjuntamente para mitigar los efectos de esta crisis hídrica.