Dos personas en un entorno elegante con un candelabro de fondo.

Rosa Maria Soberana y Lluís Areny (AC) desafian la última prohibición woke

Los dirigentes de Aliança Catalana no aceptan la censura

Hace unos días supimos que el  sector woke del Parlament había conseguido eliminar los 'Conguitos' de la cafetería de la cámara legislativa catalana. Consideran que el nombre es ofensivo para los habitantes del Congo y para las personas negras en general. La acusación no es nueva y hace tiempo que se está señalando a la empresa Lacasa, que es la encargada de producir y distribuir estos cacahuetes bañados de chocolate negro, chocolate con leche y chocolate blanco.

Sí, los Conguitos pueden ser negros, marrones o blancos. Si hay tres variedades de 'Conguitos' ¿por qué son racistas los 'Conguitos'? Sólo ellos lo saben. Algunos aseguran que el detalle racista es el dibujo, pero queda claro que no es un hombre, sino un cacahuente. Así lo explicó la empresa hace tiempo, cuando destacó que no hay conotación racista y que los 'Conguitos' son cacahuetes no personas.

La medida ha sido recibida con enfado, con risas y con sorpresa. Con sorpresa cada vez menos, porque cada vez son menos sorprendentes las ocurrencias de la Catalunya woke. En este sentido, algunos diputados se preguntan qué será lo siguiente: prohibir el café, el refresco de cola y todo lo que tenga un color que pueda ser considerado racista.

Una persona hablando en un podio con un fondo de mármol, vistiendo un blazer rosa y sosteniendo un documento.
Sílvia Orriols | Parlament

Reacción de los dirigentes de Aliança Catalana

Rosa Maria Soberana y Lluís Areny han acudido al bar del Parlament de Catalunya para comer 'Conguitos'. Los habrán traído de fuera, porque es un producto prohibido. Tienen el dilema de si comen los blancos o los negros y están muy preocupados por lo que pueda pensar la exconsejera de Igualdad, Tània Verge, dependiendo de su elección.

La publicación se ha hecho viral y han aparecido muchos comentarios en tono de humor hacia la última ocurrencia woke. Se ha abierto un debate sobre la preferencia de los 'Conguitos' negros o los 'Conguitos' blancos y, de momento, parece que ganan los 'Conguitos' negros.

La empresa lo tiene claro: no hay racismo

La respuesta de Lacasa ante estas acusaciones ha sido principalmente la defensa de la marca como un símbolo de la tradición y la cultura popular en España. La empresa ha argumentado que la figura de Conguitos no fue creada con una intención ofensiva ni racista, sino que, desde su lanzamiento en los años 60, se ha concebido como una caricatura simpática y entrañable. La marca sostiene que el personaje representa los granos de cacao de una manera amigable, y que en ningún momento se buscó perpetuar estereotipos negativos ni ofender a colectivos raciales.