La secretaria general de ER Marta Rovira, tras seis años viviendo y trabajando en Suiza, ha vuelto a Catalunya. La dirigente autonomista ha convertido su regreso en una performance que no ha gustado nada a los independentistas que se sienten engañados y traicionados. Para empezar, Rovira se grabó circulando en coche por la autopista AP7 y levantando el puño a la altura de La Jonquera cuando vio el cartel que informaba la llegada a "España", olvidando que ya estaba en Catalunya desde muchos quilómetros antes.
El espectáculo siguió en plena calle, junto con un grupo de dirigentes de ER. Rovira, que llevaba un ramo de flores en las manos, protagonizó una llegada teatralizada que buscaba una propaganda absurda e innecesaria para los espectadores de TV3, que seguramente vieron el vídeo sin los cortes. Así lo compartió Magí Hildebrandt en su cuenta de Twitter, dejando claro el momento vergonzante que protagonizaron los presentes.
Unos días más tarde, Rovira anunció una gira por toda Catalunya para convencer a los catalanes de su proyecto político. "Tengo tantas ganas de entender porque ERC tiene tan malos resultados y porque no nos hacen confianza", dijo. El mensaje ha tenido mucha repercusión y muchos catalanes hartos de tanta mentira no han tardado en contestar.
Cada vez son más los catalanes que consideran que ERC se ha transformado y lo que era un partido independentista se ha convertido en un partido procesista o autonomista. Los pactos constantes en Madrid con el PSOE y salvando la legislatura a Pedro Sánchez no ha sido bien recibido por parte de aquellos que defendieron las urnas el 1 de octubre de 2017.
La primera ha sido la alcaldesa de Ripoll, Sílvia Orriols, que le ha lanzado un reto y le ha propuesto que se desplace hasta la Cuna de Catalunya para explicárselo.
El mensaje de la diputada aliada también ha tenido muchas palabras de apoyo y de crítica hacia Marta Rovira. También le quieren explicar porque ERC pasó de los 33 diputados anteriores a los 20 actuales, unos números que no serían definitivos, ya que las encuestas pronostican una caída aún mayor.
La mayoría de opiniones van en el mismo sentido. Los catalanes consideran que es un insulto a la inteligencia los numeritos que están protagonizando después de volver de un falso exilio. En este sentido, las últimas encuestas publicadas por el sociólogo Sergi288 (y compartidas por este periódico) pronostican un resultado pésimo para el partido de Oriol Junqueras y Marta Rovira, máxime si Carles Puigdemont ya ha vuelto de su exilio. Los autonomistas podrían incluso perder el grupo parlamentario y obtener menos de diez diputados.