Hace cosa de una semana, el temporal de la DANA afectó en Catalunya después de las graves inundaciones vividas en Valencia. Por suerte, el temporal no fue tan contundente como si se vio en el país valenciano, aunque vimos varias imágenes de zonas y calles completamente sepultadas por las fuertes precipitaciones. En concreto, el temporal afectó a parte del sur de Catalunya y del litoral.
Además, hizo que varios servicios como los trenes de Rodalies Renfe tuvieran que ser suspendidos durante varias horas. Ahora, cuando parecía que la temperatura volvía a ser relativamente calmada, nos enfrentamos a una nueva semana de tormentas y grandes lluvias en muy cortos lapsos de tiempo. Es por ello que el Govern ha decidido tomar varias medidas.
Suspendidas las clases en estos sitios
El Govern suspende las clases de escuelas y universidades y restringe la movilidad a cinco comarcas este miércoles por la previsión de lluvias intensas. Las comarcas donde se aplicarán las restricciones son el Tarragonès, el Montsià, el Baix Ebre, la Ribera d'Ebre y el Baix Camp.
Lo ha anunciado la consellera de Interior y Seguridad Pública, Núria Parlon, quien ha explicado que se publicará una resolución y se enviará una alerta a los móviles de las comarcas afectadas para informar a la ciudadanía.
Parlon indicó que las restricciones a la movilidad no esencial estarán vigentes desde las seis de la mañana y hasta la medianoche y también dijo que se recomienda el teletrabajo.
En algunos puntos se puede llegar a los 100 litros en 24 horas, si bien las predicciones pueden ser “cambiantes”. La consellera ha dicho también que es posible que el jueves por la mañana la dana se aleje de Catalunya y se dirija más hacia Portugal.
El motivo de la decisión
Las clases suelen suspenderse cuando hay riesgos de temporales principalmente para garantizar la seguridad de los estudiantes, profesores y personal educativo. Los temporales pueden incluir fuertes lluvias, vientos intensos, nevadas o tormentas eléctricas, que no solo representan un riesgo para quienes deben trasladarse a los centros educativos.
Sino que también pueden causar daños en las infraestructuras de las escuelas, como techos, ventanas o servicios básicos. Además, las condiciones de algunas carreteras pueden volverse peligrosas por inundaciones, deslizamientos de tierra o acumulación de nieve, haciendo que el transporte escolar o privado sea arriesgado.
También, al suspender las clases, se evita que los padres y las autoridades tengan que tomar decisiones de último momento para gestionar las situaciones de emergencia. En zonas con alto riesgo de temporales, los protocolos de seguridad priorizan la prevención para reducir el impacto de los fenómenos naturales en la comunidad escolar.
Y permitir que los recursos de emergencia se concentren en las áreas que requieren más atención. Además, en caso de daños en el centro educativo, las suspensiones permiten llevar a cabo reparaciones necesarias sin poner en riesgo a los alumnos.