El Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) ha lanzado una nueva previsión que no dejará indiferentes a quienes ya se habían acostumbrado a la estabilidad invernal de los últimos días. Aunque el año continúa con un ambiente frío, las temperaturas experimentarán un ligero ascenso que será de corta duración, para luego volver a descender de forma clara. Además, el sábado llegará un frente que traerá precipitaciones tanto en el Pirineo como en otras zonas del territorio catalán.
A continuación, desglosamos la evolución prevista para los próximos días, en especial la inestabilidad que el Meteocat ha querido subrayar, y las implicaciones que el cambio de tiempo puede tener en zonas montañosas y de interior. Las comarcas costeras también podrían verse afectadas, por lo que se insta a la ciudadanía a mantenerse informada.
Subida efímera de temperaturas
Según la última actualización del Meteocat, el jueves mantendrá un ambiente fresco pero sin grandes sobresaltos, con máximas que podrían superar ligeramente las de jornadas anteriores. El viernes, en cambio, se prevé un cierto repunte de los termómetros a lo largo de la mañana, permitiendo que el ambiente sea un poco más templado de lo que cabría esperar en pleno mes de enero.
Sin embargo, los meteorólogos insisten en que este ascenso será breve, pues las mínimas seguirán siendo bajas durante la madrugada y primeras horas de la mañana, y se producirá un nuevo giro a la baja en cuanto llegue el frente anunciado.
Esta alternancia térmica obliga a extremar la prudencia en la conducción nocturna e interurbana, puesto que la formación de bancos de niebla o incluso la presencia de hielo en la calzada no pueden descartarse. Especial atención deben prestar los conductores que transiten por tramos montañosos o valles cerrados, donde los contrastes de temperatura se notarán con mayor intensidad.
Sábado: llegada de un frente con lluvia y nieve
El Meteocat sitúa el sábado como punto de inflexión. Un frente entrará por el noroeste, trayendo precipitaciones al Pirineu, Prepirineu y, de forma más dispersa, a otras áreas del país.
Aunque los modelos actuales no apuntan, por el momento, a un episodio de lluvias torrenciales, sí se espera que el Pirineu reciba nevadas en cotas relativamente medias, de modo que las estaciones de esquí y los entornos montañosos podrían verse beneficiados por un nuevo manto blanco.
El resto del país podría experimentar chubascos intermitentes, más frecuentes en comarcas del interior y en la mitad norte, mientras que las zonas litorales oscilarán entre periodos soleados y chaparrones pasajeros. Con la caída de las temperaturas en paralelo, el frío volverá a ser el protagonista al finalizar la semana.