El problema de los multirreincidentes en Catalunya ha sido uno de los temas más preocupantes en el ámbito de la seguridad pública. Los delitos cometidos por personas que, a pesar de ser detenidas varias veces en un corto periodo, vuelven a ser liberadas y reinciden rápidamente, ha generado críticas hacia el sistema judicial.
Los Mossos d'Esquadra se enfrentan constantemente a esta realidad, ya que sus esfuerzos por detener a delincuentes se ven opacados cuando, tras su liberación, estos continúan cometiendo delitos. Las leyes actuales y la falta de medidas preventivas han permitido que individuos con múltiples antecedentes sigan actuando con impunidad, lo que ha aumentado la sensación de inseguridad en la ciudadanía.
Una detención reciente muy polémica
Un caso reciente que ha llamado la atención se ha dado en Igualada. Donde un hombre fue detenido por los Mossos d'Esquadra tras haber sido sorprendido llevando unas zapatillas robadas de un coche. Este sujeto ya había sido arrestado cuatro veces en una semana, acusado de haber cometido 14 robos en vehículos.
A pesar de sus numerosos antecedentes y el claro patrón delictivo, el juez responsable del caso decidió dejarlo en libertad nuevamente. Este hecho ha reavivado el debate sobre la efectividad del sistema judicial en Catalunya y la frustración tanto de las fuerzas policiales como de la sociedad en general. Los hechos ocurrieron cuando los Mossos recibieron una denuncia por el robo de unas zapatillas deportivas del interior de un coche en Igualada.
Tras unas horas de búsqueda, encontraron al sospechoso caminando por la zona con las mismas zapatillas puestas. La detención se llevó a cabo sin incidentes. Pero lo sorprendente es que este mismo individuo ya había sido detenido tres veces más durante la semana anterior por robos similares en vehículos.
En total, se le atribuyen 14 delitos en un periodo de tiempo extremadamente corto. A pesar de este historial, y del evidente riesgo de reincidencia, el juez decidió no imponer medidas cautelares más severas. Lo que ha generado una ola de indignación entre la población y los propios cuerpos de seguridad.
Este tipo de decisiones judiciales refuerzan la percepción de impunidad y alimentan la desesperación de quienes ven cómo sus pertenencias son robadas una y otra vez por los mismos delincuentes. Casos como este no son aislados, y ponen en evidencia la necesidad urgente de revisar las leyes que regulan la reincidencia y el tratamiento de los delitos menores. Aunque el robo en vehículos pueda parecer un delito de poca gravedad.
Su repetición constante, sumada a la falta de consecuencias reales para los perpetradores, afecta la convivencia y la percepción de seguridad en las ciudades. Mientras tanto, los Mossos d'Esquadra continúan haciendo su trabajo en la calle, aunque muchas veces, como en este caso, sienten que sus esfuerzos no son respaldados adecuadamente por el sistema judicial.