El Barça comunicaba en sus redes sociales hace unos días el alta médica para poder jugar de Frenkie de Jong tras más de 5 meses inactivo y fuera de los terrenos de juego. Un choque fortuito con Fede Valverde en el clásico disputando un balón provocaba una lesión de tobillo del jugador holandés que se le complicaría más de los previsto al ser una zona ya afectada previamente en la que había tenido algún esguince meses atrás. Tras estar muchos meses fuera, Frenkie regresaba a la dinámica de grupo y a entrenar con el equipo hace unas semanas y sería en Champions contra el Young Boys con el partido resuelto cuando tendría unos minutos para ir cogiendo buenas sensaciones de nuevo.
Koeman, alarma a todos los culés
Ronald Koeman, entrenador de Frenkie en Países Bajos alertaba del regreso del jugador como una situación en la que se debe tener mucha precaución y paciencia. "Hablé por teléfono la semana pasada y, con todos mis respetos, todavía está demasiado lejos. Jugó un poco y ya le asustó. Fue difícil para él" expresaba el técnico a lo que también decía:
"Frenkie necesita encontrar su ritmo y estar al cien por cien de forma y creo que aún le queda", también haciendo alusión a hace un año cuando el club forzó a Frenkie de Jong a regresar antes de lo previsto. El Barça está carente de mediocentros y aunque han aparecido jugadores como Marc Casadó en los últimos meses que está cumpliendo muy bien, el club sigue necesitando jugadores para la causa.
Frenkie, indispensable para Hansi Flick:
Uno de las personas que se opuso a la salida del jugador holandés fue Hansi Flick, que está convencido de encontrar el lugar y sacarle el máximo rendimiento a un jugador de la calidad de Frenkie de Jong. Cree que con el sistema de juego y la presión alta que está haciendo el equipo puede encontrarle un hueco en ese doble pivote junto a Marc Casadó o el mismo Gavi cuando vuelva. Confía en la capacidad técnica y asociativa del equipo y el hecho de jugar con dos extremos largos y verticales hace que su juego sea más fluido y se pueda nutrir de esos espacios a la espalda de las defensas rivales.
Frenkie tiene contrato hasta 2026 y en declaraciones recientes afirmaba: Estoy muy feliz en el Barça, el equipo de mis sueños y estoy con muchas ganas de volver a jugar con el equipo”. Su salario, una losa que hizo que le criticase un sector de la afición también quiso dejar claro que no cobra lo que se dice en los medios, “Se dicen muchas mentiras, no cobro eso de que se habla. Entiendo que la gente se enfade porque escucha eso pero es mentira”. Y hay que recordar que su sueldo es diferido porque llegó a un acuerdo con el club para ese diferimiento y que computase en la masa salarial de una forma que beneficiase al club.