Quedan poco menos de dos meses para las elecciones presidenciales en Estados Unidos y las encuestas dibujan un panorama muy reñido entre Kamala Harris, actual vicepresidenta y candidata demócrata y Donald Trump, candidato republicano.
El ambiente es muy tenso, especialmente desde que Trump sufriera un intento de asesinato hace unas semanas. Una bala le rozó la oreja. Desde entonces se ha reforzado su seguridad y el riesgo sigue bien presente. Hoy mismo se ha podido comprobar.
El FBI investiga el intento de asesinato al candidato republicano
El expresidente Donald Trump ha salido ileso de lo que el FBI ha calificado como un nuevo intento de asesinato en su club de golf en West Palm Beach, Florida. El atentado, que ocurrió mientras Trump jugaba al golf, fue frustrado por agentes del Servicio Secreto que detectaron un rifle oculto en los arbustos cercanos.
El atacante huyó, pero la policía detuvo a un sospechoso y recuperó un AK-47 modificado. Este es el segundo atentado en los últimos meses, después de que en julio, durante un mitin en Pensilvania, Trump fuera herido en la oreja por un tirador solitario. El primer ataque se cobró la vida de un asistente y fue un grave fallo de seguridad del Servicio Secreto, lo que provocó la dimisión de su responsable.
En el ataque de hoy, el rifle estaba equipado con una mirilla, lo que indicaba la clara intención de asesinar al expresidente. Gracias a la rápida acción de un testigo que capturó una imagen del vehículo del atacante, la policía logró detener al sospechoso poco después del tiroteo. Aunque las autoridades no han revelado la identidad del detenido, han confirmado que estaba desarmado en el momento de su captura.
A la espera de un comunicado de Donald Trump
En el atentado de hace unas semanas, el propio Trump envió un mensaje a sus seguidores afirmando que estaba "sano y salvo" y agradeciendo su apoyo. También expresó que no dejará de luchar por su causa, manteniendo su lema de "Hacer América Grande de Nuevo". En el momento de la redacción de esta noticia, Trump todavía no se ha pronunciado.
Este atentado aumenta la tensión en una campaña electoral ya de por sí accidentada, con encuestas que muestran un empate técnico entre Trump y la actual vicepresidenta Kamala Harris. A pesar de la escalada de violencia, ambos candidatos continúan con sus agendas de campaña en un ambiente cada vez más polarizado.